El concepto de bienes esenciales hace referencia a aquellos activos sin los que una sociedad no puede desarrollar la actividad que constituye su objeto social. La Ley 31/2014, que modificó la Ley de Sociedades de Capital, introdujo un cambio que reservaba la adquisición, la venta y la aportación de los activos esenciales a la Junta General. En esta nota informativa, TARSSO pone el foco sobre las operaciones de adquisición y transmisión de activos esenciales a otras sociedades, que puedan entenderse como “no vinculadas”.